El partido estuvo signado por la equidad hasta promediar el segundo tiempo, cuando la categoría del último campeón logró establecer diferencias ante un adversario que mereció el mayor de los reconocimientos.
Cha Roga: Daniel Alegre (Julio Deré), José Ruiz y Alfredo Morillas (Rubén Pernussi); Nicolás Carpegna y Pablo Frugoni; Guillermo Aguilera (capitán, luego Diego Villamayor), Martín Fernández (Néstor Otaduy) y Mariano Gómez; Alexis Zilonka y Juan Carlos Villamayor (Miguel Rupell); Federico Andreu, Walter Pavetto, Diego García, Pablo Parissi y Andrés Gianfelici (Jeremías Volpe). Head Coach: Alberto Morán.
La etapa inicial
Tal como ocurriera en la apertura del certamen ante CRAI, Cha Roga Club dio muestras claras de que es un equipo que conoce a la perfección sus virtudes y defectos. Entonces, desde el kick-off se aferró a una valiente actitud colectiva e individual, focalizada en una defensa ordenada y en la plausible tarea de un pack de forwards que funcionó muy bien en la lucha por la posesión de la pelota.
A tal punto lo logró, que el anfitrión recién cruzó la mitad de cancha cuando transcurrían los 13 minutos iniciales, lapso en el cual el visitante desperdició un par de ocasiones propicias para abrir el marcador.
Como contrapartida, Santa Fe RC sumó a través de un penal y minutos más tarde, merced a un ensayo del mejor jugador del partido: Diego Colli, quien se erigió en el sostén de los momentos más delicados por los que atravesó su equipo: no sólo marcando el rumbo adecuado, sino también transformándose en artífice indispensable de la mayoría de las conquistas de su equipo.
Inmediatamente Cha Roga Club logró plasmar en el ingoal adversario la plausible tarea realizada en el primer tiempo, anotando dos conquistas consecutivas, que sumadas a una segunda de su rival y a una tercera propia, cerraron los cuarenta minutos iniciales con el 18 a 15 en favor del equipo local, resultado que sin dudas no reflejó lo acontecido en el campo de juego.
El complemento
Pese a que el meritorio equipo visitante intentó mantener su protagonismo, el segundo tiempo “duró” hasta el primer cuarto de hora, ya que al tercer try local se sumó la baja del capitán visitante, Guillermo Aguilera, que al igual que su compañero de tercera línea, Martín Fernández, tuvieron que ser reemplazados por sendas lesiones.
De allí en más, el contenido se direccionó hacia una incuestionable supremacía del campeón 2008, que una y otra vez aprovechó con creces las impericias de un adversario que se fue desarticulando con el correr de los minutos.
Entonces no extrañó que llegasen cinco conquistas más, elaboradas con gran contundencia y en varios casos, con lucidas acciones colectivas o individuales, pero que en su gran mayoría nacieron a partir de errores rivales.
En síntesis…
Santa Fe Rugby Club ganó en forma tan categórica como inobjetable, a partir de una producción que fue de menos a más y que amén que distó de ser la que es capaz de alcanzar, por lo menos contuvo algunos destellos de los argumentos que lo proyectaron hacia la cúspide regional.
En ese contexto, podría citarse que asomó el sistema defensivo que lo distingue; que poseyó la suficiente serenidad como para soportar estoicamente los no pocos momentos adversos que debió soportar durante el desarrollo; y también que además de la extraordinaria actuación del octavo citado en forma precedente, encontró algunas respuestas individuales estupendas que sirvieron para marcar diferencias en los momentos más oportunos, como las de Luis Mariano Cabal, Lepoldo Maillot o Martín Butto.
Por su parte, Cha Roga Club volvió a demostrar que posee argumentos válidos para defender a ultranza su permanencia en el sector más selecto de la competición. Sus mayores preocupaciones, quizás podrían surgir desde la imperiosa necesidad de encontrar los relevos acordes para las bajas que inexorablemente se suceden en un ámbito que cada fin de semana, le exigirá mayores esfuerzos.
Debe mejorar
Más allá de que su irregular performance no tuvo injerencia en el desenlace de un partido que terminó definiéndose en forma categórica, resulta propicio señalar que la actuación del referee santafesino Emilio Traverso distó de ser la ideal.
Fundamentalmente, porque dio la impresión que fue especialmente riguroso en observar el accionar de un solo equipo -el visitante-, luciendo además demasiado presuroso en tomar decisiones que de por sí son muy importantes. Como por ejemplo, al aplicar un sin bin al capitán de Cha Roga Guillermo Aguilera, a escasos minutos del comienzo del juego.
Sabido es que la base de todo buen referato pasa no sólo por la capacidad de conducción de un cotejo, sino también por la ecuanimidad en el juzgamiento de las acciones generadas por cada uno de los protagonistas, por más diferentes que luzcan sus potencialidades o estilos de juego.
Toda la fecha…
GER 48 - Jockey Club 22; Duendes 54 - Uni SF 0; Uni Rosario 42 - CAE 26; CRAI 33 - Caranchos 6; Santa Fe RC 54 - Cha Roga 15. CRAR - Provincial (postergado)
Las posiciones…
CRAI y Duendes 10; GER y Uni Rosario 9; Santa Fe RC 6; Provincial 4; CAE 2; Caranchos, Uni Sta Fe y CRaR 1; Cha Roga 0.
La etapa inicial
Tal como ocurriera en la apertura del certamen ante CRAI, Cha Roga Club dio muestras claras de que es un equipo que conoce a la perfección sus virtudes y defectos. Entonces, desde el kick-off se aferró a una valiente actitud colectiva e individual, focalizada en una defensa ordenada y en la plausible tarea de un pack de forwards que funcionó muy bien en la lucha por la posesión de la pelota.
A tal punto lo logró, que el anfitrión recién cruzó la mitad de cancha cuando transcurrían los 13 minutos iniciales, lapso en el cual el visitante desperdició un par de ocasiones propicias para abrir el marcador.
Como contrapartida, Santa Fe RC sumó a través de un penal y minutos más tarde, merced a un ensayo del mejor jugador del partido: Diego Colli, quien se erigió en el sostén de los momentos más delicados por los que atravesó su equipo: no sólo marcando el rumbo adecuado, sino también transformándose en artífice indispensable de la mayoría de las conquistas de su equipo.
Inmediatamente Cha Roga Club logró plasmar en el ingoal adversario la plausible tarea realizada en el primer tiempo, anotando dos conquistas consecutivas, que sumadas a una segunda de su rival y a una tercera propia, cerraron los cuarenta minutos iniciales con el 18 a 15 en favor del equipo local, resultado que sin dudas no reflejó lo acontecido en el campo de juego.
El complemento
Pese a que el meritorio equipo visitante intentó mantener su protagonismo, el segundo tiempo “duró” hasta el primer cuarto de hora, ya que al tercer try local se sumó la baja del capitán visitante, Guillermo Aguilera, que al igual que su compañero de tercera línea, Martín Fernández, tuvieron que ser reemplazados por sendas lesiones.
De allí en más, el contenido se direccionó hacia una incuestionable supremacía del campeón 2008, que una y otra vez aprovechó con creces las impericias de un adversario que se fue desarticulando con el correr de los minutos.
Entonces no extrañó que llegasen cinco conquistas más, elaboradas con gran contundencia y en varios casos, con lucidas acciones colectivas o individuales, pero que en su gran mayoría nacieron a partir de errores rivales.
En síntesis…
Santa Fe Rugby Club ganó en forma tan categórica como inobjetable, a partir de una producción que fue de menos a más y que amén que distó de ser la que es capaz de alcanzar, por lo menos contuvo algunos destellos de los argumentos que lo proyectaron hacia la cúspide regional.
En ese contexto, podría citarse que asomó el sistema defensivo que lo distingue; que poseyó la suficiente serenidad como para soportar estoicamente los no pocos momentos adversos que debió soportar durante el desarrollo; y también que además de la extraordinaria actuación del octavo citado en forma precedente, encontró algunas respuestas individuales estupendas que sirvieron para marcar diferencias en los momentos más oportunos, como las de Luis Mariano Cabal, Lepoldo Maillot o Martín Butto.
Por su parte, Cha Roga Club volvió a demostrar que posee argumentos válidos para defender a ultranza su permanencia en el sector más selecto de la competición. Sus mayores preocupaciones, quizás podrían surgir desde la imperiosa necesidad de encontrar los relevos acordes para las bajas que inexorablemente se suceden en un ámbito que cada fin de semana, le exigirá mayores esfuerzos.
Debe mejorar
Más allá de que su irregular performance no tuvo injerencia en el desenlace de un partido que terminó definiéndose en forma categórica, resulta propicio señalar que la actuación del referee santafesino Emilio Traverso distó de ser la ideal.
Fundamentalmente, porque dio la impresión que fue especialmente riguroso en observar el accionar de un solo equipo -el visitante-, luciendo además demasiado presuroso en tomar decisiones que de por sí son muy importantes. Como por ejemplo, al aplicar un sin bin al capitán de Cha Roga Guillermo Aguilera, a escasos minutos del comienzo del juego.
Sabido es que la base de todo buen referato pasa no sólo por la capacidad de conducción de un cotejo, sino también por la ecuanimidad en el juzgamiento de las acciones generadas por cada uno de los protagonistas, por más diferentes que luzcan sus potencialidades o estilos de juego.
Toda la fecha…
GER 48 - Jockey Club 22; Duendes 54 - Uni SF 0; Uni Rosario 42 - CAE 26; CRAI 33 - Caranchos 6; Santa Fe RC 54 - Cha Roga 15. CRAR - Provincial (postergado)
Las posiciones…
CRAI y Duendes 10; GER y Uni Rosario 9; Santa Fe RC 6; Provincial 4; CAE 2; Caranchos, Uni Sta Fe y CRaR 1; Cha Roga 0.
